Mentira Política


“…a los gobiernos les interesa que no sepamos de ná, les resulta más sencillo a la hora de mentir…”. (Jambo Loco, La Excepción).

“…la mentira política es el arte de hacer creer al pueblo falsedades saludables…”. (Jonathan Swift).

“El poeta nos dice que cuando los dioses derrocaron a los monstruos, la tierra en venganza dio luz a su última hija: la Fama. La fábula debe interpretarse como sigue: cuando los tumultos y las sediciones se acallan, los rumores y las noticias falsas circulan con profusión por la nación. según esto, la mentira sería el último consuelo de los grupos derrotados, terrenales y rebeldes. Pero los modernos han aportado grandes mejoras al aplicar este arte también para hacerse con el poder y conservarlo y no sólo por vengarse cuando lo han perdido…

Hay una cosa esencial que distingue a la mentira política: ha de ser efímera; le resulta imprescindible para poder ir ajustándose a las circunstancias, para avalar las dos partes en disputa, para adecuarse a todas las personas que ha de deslumbrar…
Algunos podrán pensar que semejantes mentiras dejan de ser útiles a su progenitor, o a su partido, cuando tras usarse con tanta frecuencia han acabado delatando a sus creadores: se equivocan, y no poco… Al igual que el más vil de los escritores tiene sus lectores, el más grande de los mentirosos tiene sus crédulos: y suele ocurrir que si una mentira perdura una hora ya ha logrado su propósito, aunque no perviva. La falsedad vuela, mientras la mentira se arrastra tras ella, de suerte que cuando los hombres se desengañan, lo hacen un cuarto de hora más tarde…

Considerando la natural propensión del hombre a mentir y de las muchedumbres a creer, confieso no saber cómo lidiar con esa máxima tan mentada que asegura que la verdad acaba imponiéndose…”.

“De vez en cuando di la verdad para que te crean cuando mientes”. (Jules Renard).


A cuidarse