No es fácil para mí observar la
destrucción de las pocas empresas que a diario hacen un esfuerzo dantesco por
echar adelante la producción de alimentos en un país donde el 90% de las
operaciones económicas provienen de actividades del contrabando, el pago de
vacunas a militares y consejos de personas empoderadas por la propia tiranía
para ser cómplices de la destrucción.
Como profesional he tenido que
responder preguntas anti dignidad, por ejemplo: “¿Cómo se registra
contablemente esta factura cuyo costo viene con un recargo del 3000% por pagos
a un General que controla el suministro de harina, de cauchos, de baterías,
entre muchos otros rubros?” Eso es aberrante!!!
Sin embargo le diré a todo aquel
que lea este mensaje, con mucha dignidad profesional y amparado en los
distintos principios que como profesionales y según la Propia ley del ejercicio
de la contaduría pública nos da, al delegar en nosotros la implementación de
políticas contables de uso general en el territorio Venezolano. Esto que les
comentare es para que se preparen y se condicionen mentalmente, pues viene
mucho más desorden y anarquía que es algo distante al sistema político
anárquico.
La hipótesis fundamental
establecida en el marco conceptual de las normas contables de aceptación
general en Venezuela, los VEN-NIIF, NIIF plenas y Pymes, es la Hipótesis
del negocio en marcha. Esta hipótesis establece lo siguiente:
La información financiera se prepara normalmente bajo el supuesto de que una entidad está en funcionamiento y continuará su actividad dentro del futuro previsible. Por lo tanto, se supone que la entidad no tiene la intención ni la necesidad de liquidar o recortar de forma importante la escala de sus operaciones; si tal intención o necesidad existiera, los estados financieros pueden tener que prepararse sobre una base diferente, en cuyo caso dicha base debería revelarse.
Cuando veo el accionar de estos fiscales
de un organismo creado para la destrucción del aparato productivo amenazando a
propietarios de las panaderías del país, donde se llevan a cabo ejecuciones de
muchas, es necesario que se concluya que la hipótesis de negocio en marcha
desaparece de pleno. Un negocio que este bajo este esquema de presión simplemente
no existe y es nulo. Es vago crear información para los usuarios, es de mucho riesgo otorgar créditos a plazos cortos, medianos y largos, es difícil entregar lo
poco que producen a una institución financiera que en cualquier momento te
congelan dichos fondos, es nulo de total nulidad la acumulación de capital para
solamente liquidar deudas tributarias que violan completamente el ordenamiento
jurídico, me disculpan por ser optimista en creer que aun existe un orden
jurídico, somos los sin seguridad jurídica del mundo.
El llamado es al desconocimiento
de las normas, de nada les vale cambiar de actividad, hoy son panaderías,
mañana ferreterías, y así toda empresa de baja o gran escala. No se entreguen,
conviértanse en los paralegales, es su legítima defensa. Protejan sus
patrimonios y hagamos que se reaccione ante tanto desorden.